Tercer Cielo y Ariel Kelly | Tú Fuiste

Tú fuiste el que te quedaste y no te fuiste
cuando nadie me vio, me dio nombre, me viste
por amor a mi vida, la tuya diste
tu sangre derramaste y así me redimiste
volviste a perdonarme sin yo merecerlo
¿Por qué me amas tanto? No dejo de pensarlo
En adoración mis brazos a ti yo voy a alzarlos
postrarme en tu presencia
tu santo manto besarlo
eres perfecto
como tú yo quiero ser
caminar no a mi manera
sino como tú lo has de hacer
para vencer los obstáculos y tentáculos que me atan
pensamientos que me matan
cuando la duda ataca
tú envías
la palabra que ha de transformar
mi casa, mi mundo, mi vida, mi hogar
te amo Jesús, de ti estoy agradecido
y sé que la vida sin ti no tiene sentido
Señor cuando mi vida no tenía algún valor
tu amor me abrazó
y sobre mí resplandeció
mandaste a vestirme con ropa real
agradecido estoy de que me llames tu hijo hoy
Tú fuiste quien vio mis faltas y por amor se dio
quien mi clamor oyó
cuando yo lloraba en secreto
quien me dio las fuerzas para que acepte el reto
y soy más que vencedor
porque habitas en mi adentro
mi guarda, mi guía, mi libertador
quien salió en mi defensa
cuando el mundo me acusó
quien echa fuera el temor
a quien no le importa el rumor
y aunque yo no lo merecía
de su gloria me vistió
mi alabanza en tus pues vierto como perfume
quita lo que me resta, trae a mí lo que me sume
quiero vivir en santidad, padre
como a ti te agrada
y andar en rectitud ya que fuera de ti no hay nada
eres siete veces santo, que toda alma te adore
la creación te cante y se postre todo hombre
el enemigo conocía mi nombre
y me llamó por mi pecado
tú conocías mi pecado
y me llamaste por mi nombre
Señor cuando mi vida no tenía algún valor
tu amor me abrazó
y sobre mí resplandeció
mandaste a vestirme con ropa real
agradecido estoy de que me llames tu hijo hoy
Y desde entonces me sientas en tu mesa
y puedo disfrutar de tu presencia
darte mi adoración
y cantarte con toda el alma

Comentarios

Entradas populares de este blog

Remen | SKAPALTATA

Skapaltata - Tu Mirada

Cuando Mis Fuerzas Se Acaben | Ruth Alfaro